viernes, 2 de septiembre de 2011

Evaluación funcional, Elementos y componentes.

El estado funcional es la capacidad del individuo de funcionar en múltiples áreas tales como la esfera física,
mental y social. La calidad de vida de los gerontes está determinada más por su capacidad funcional que
por el número o tipo de enfermedades específicas que padecen. Por otro lado, la declinación en el estado
funcional suele ser la forma de presentación inicial de muchas enfermedades en estos pacientes, por lo que
la evaluación funcional representa un componente esencial del cuidado clínico de los ancianos.

La evaluación funcional es una herramienta que valora los diferentes componentes que pueden afectar
el estado funcional del paciente anciano (esferas física, cognitiva, emocional y social). Este abordaje
permite asistir a la salud del paciente de una manera integral, intentando mantenerlo en el nivel más
alto de su funcionalidad, formulando recomendaciones y diseñando estrategias para su cuidado.


La evaluación funcional tiene las siguientes características:

1.Reconoce la declinación funcional como la expresión de una enfermedad subyacente: por ejemplo, el
hecho de que un paciente que habitualmente viajaba en cualquier medio de transporte sin dificultades
comience a tener problemas para hacerlo, se desoriente o tenga confusiones con el dinero, constituye
un signo de deterioro del estado funcional que debe tomarse como signo de que algo perjudicial
está ocurriendo.

2.Permite evaluar y objetivar el grado de independencia del paciente que, a su vez, está íntimamente
relacionado con la calidad de vida y el costo asistencial.

3.Incrementa la efectividad del examen clínico: esto es así porque aporta una sistemática en el
abordaje del paciente y utiliza escalas que permiten objetivar su deterioro o mejoría.

4.Ayuda a diagnosticar el deterioro y facilita el seguimiento y la evaluación de los tratamientos
implementados. La evaluación funcional no hace diagnóstico de enfermedades, pero detecta el
deterioro y constituye el puntapié inicial para comenzar una evaluación más profunda del paciente.

5.Crea un lenguaje común entre quienes se dedican a la atención de pacientes ancianos, lo que
facilita el encuadre real del paciente, fundamental para la toma de decisiones.

No hay comentarios:

Publicar un comentario